lunes, 15 de septiembre de 2008

Crucero por el Rio Huangpu



Hacía dos días apenas que navegábamos el Chicago River para nuestra lección de arquitectura y estábamos a punto de repetir la experiencia con un paseo en barco por el Río Huangpu! El crucero de una hora por el río tenía el módico precio de US $4.72, algo que sentimos baratísimo considerando los precios de las cervezas de la noche anterior! Compramos nuestros boletos en una desvencijada oficina a orillas del río, y nos hicieron pasar a una pequeña sala de espera, que tenía un insoportable olor a humanidad china... Tienen un olor ácido o agrio, muy peculiar, posiblemente por la raíz de bambú o la raíz de la flor de loto, las cuales tienen ese olor que tuvimos que soportar durante todo nuestro viaje y que posiblemente al final también nosotros los teníamos impregnado... Como dato curioso, una amiga de Carolina López me comentaba antes de salir de viaje, que un amigo chino le comentó que para ellos los occidentales tenemos un olor insportable a leche y queso, lo cual causó bromas durante todo nuestro viaje, pues cuando sentíamos el característico olor agrio de la humanidad china, los amenazábamos con atacarlos con nuestro olor a leche de cabra! ;-)

El crucero salía a las 11:00 de la mañana, y en esa inmunda sala de estar no había señas de un puente de abordaje. Nos acompañaban en nuestra espera una elegante señora francesa de pelo blanco algodón y su muy guapa nieta, quien estaría dentro de la veintena de edad. La barrera del idioma no nos permitía comunicarnos, pero nos dábamos solidaridad mutua de no saber cuáles eran los próximos pasos... Hasta que entró un hombre chino y nos pidió en inglés que lo acompañáramos, para guiarnos hasta un autobus, lo cual causó la pregunta de la señora francesa: “y que no era un barco”, a lo que le respondieron: “en 5 minutos”, tiempo exacto que le tomó al bus en llevarnos hasta un muelle a unas cuantas cuadras del lugar de nuestra compra.

El barco era parte del Shanghai Huangpu River Cruise Company (les pondría el sitio web de Internet, pero está completamente en chino!), que tienen una flota de 7 naves para hacer recorridos que van desde una hora hasta toda una tarde. Nosotros optamos solo por un pequeño vistazo de la ciudad desde el río.... Practicamente fuímos los últimos en abordar, y subimos a la cubierta del tercer piso a través de una pequeña escalera de caracol....
La cubierta exterior ya estaba completamente abarrotada por turistas de todas las nacionalidades, pero primordialmente locales. No tocaría de pie, pues ya estaban ocupados todos los asientos plásticos blancos que habían dispuesto en forma de mini-comedores. Además, al contrario de nuestra experiencia en Chicago, en lugar de un catedrático, nos acompañaba un aparato de sonido que tenía muy mala resonancia, por lo que las explicaciones en inglés nos sonaban igual a chino. No puedo decir en esta ocasión que fue una experiencia didáctica, pero si gozamos mucho del paisaje urbano.

Y como la naturaleza tiene sus jugarretas eventuales en este tipo de paseos, a los 5 minutos de haber zarpado, el cielo se pusó negro negro negro y cayó una tormenta de Padre y Señor mío, lo que causó el caos en la cubierta, pues para bajar a la parte techada del barco, se tenía que pasar por la única estrecha escalera de caracol, con tanta suerte que quedamos nosotros prácticamente de último, con lo que nos empapamos y al llegar al nivel inferior, ya todas las sillas de la cafetería interior estaban ocupadas... El destino quería que siguieramos de pie! Así que nos resguardamos en un pedazo exterior techado donde podíamos apreciar la gran ciudad al mismo tiempo que la brisa y la lluvia chocaba contra nuestros rostros... Pero como se disfrutan mejor estos paseos acuáticos si no es en el exterior? Qué mejor ubicación para ver la bandera ondeante del barco en movimiento? O para apreciar los rascacielos sin 50 chinos bloqueando nuestras fotos? Interesantemente su servidor se puso a hacer una especie de danza del sol, bajo la premisa que de todas formas nadie me conocía y con el afán de liberar un poco el estrés, y a los 10 minutos la nube se disipó, pero me faltó probablemente más fé, pues en cuestión de 2 minutos más se volvió a formar y continuó el tormentón!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola.! dejame decirte que tu aventura bajo la lluvia en ese crucero parece fue muy divertido.!! tambien quiero contarte que mientras tu te mojaste allá, aqui en El Salvador estuvo un sol muy bonito claro era de esperarse... dia de independencia .... cuidate besos.

Centro Europa 2006